Una receta no muy conocida pero fácil de hacer, que nos gusta mucho en casa y es perfecta para comer pescado y verduras de una manera saludable. Mantenemos la dieta disfrutando de los sabores y cada comida. Antes de nada, nos gustaría hablaros de la alcachofa y la sepia, esperamos que esta receta os guste tanto como a nosotros.
La alcachofa y sus propiedades
La alcachofa es una verdura deliciosa con propiedades naturales muy beneficiosas para tu organismo. La alcachofa es una hortaliza muy rica en minerales y vitaminas, como son el potasio, sodio, calcio y la vitamina A. Según se dice ayuda a ralentizar el envejecimiento de las células y la piel. También es muy rica en fibra, lo que ayuda a reducir la glucosa en sangre y ayuda a prevenir el estreñimiento.
Así la Alcachofa es la flor de la alcachofera, una planta con un tallo y hojas grandes de color verde que pincha un poco. La alcachofa se come cuando aún es tierna, porque a medida que envejecen se endurece y tienen como un pelo en su interior que hace que no sea tan placentero comérsela; cuando envejece, ésta florece en una gigantesca flor púrpura muy bonita de ver. Cierto es que hay gente que también consume los tallos de las hojas de las alcachoferas.
El origen de la alcachofa
Esta planta procede de Egipto, de allí fue distribuida por el Mediterráneo. Lleva consumiéndose desde el siglo IV aC en diferentes platos y se conservaba en miel y aceite. Una hortaliza actualmente muy apreciada y con precios elevados en el mercado.
La sepia como alimento que no puede faltar en nuestra dieta
La sepia contiene una gran fuente de minerales como son el yodo, el calcio y el selenio. El más destacado es el yodo porque contiene por cada 100 gramos de sepia, 64mg de yodo y éste, nos ayuda a mejorar el sistema circulatorio y el metabolismo.
También, es rica en vitaminas A, B y E que favorecen nuestro sistema nervioso y el correcto funcionamiento del sistema inmunológico, del corazón y del cerebro, y estas vitaminas, nos ayudan a transformar esos nutrientes en energía.
Además, la sepia nos aporta una gran cantidad de proteínas y, gracias a su bajo contenido en grasas saturadas y calorías, convierten este apreciado manjar en un alimento perfecto para aquellas personas que tengan intención de empezar una dieta.
No obstante, no podemos hacer abuso de este molusco para las personas que tienen altos los niveles de colesterol.
Debemos tener en cuenta que, dependiendo de la forma de cocinar los alimentos, no serán iguales los beneficios que nos pueda aportar. Contra menos tiempo de cocinado, siempre nos aportará más nutrientes a nuestro organismo.
Alcachofas guisadas con sepia
Hoy os traemos una receta deliciosa, muy sana y, sobre todo, fácil de cocinar. Esta es una receta de temporada, así que aconsejamos aprovecharla cuando estén disponibles las alcachofas y cocinarlas en tortilla, arroces o guisos como este con sepia con alcachofas.
Quedará sublime si los productos son de primera calidad y si son de proximidad mucho mejor. Consigue unas buenas alcachofas, por ejemplo, del Prat de Llobregat o del Maresme y una buena sepia de tu pescadería de confianza.
Ingredientes:
- 1 kilo de alcachofas limpias
- 800 gramos de sepia
- 4 tomates grandes y maduros
- 2 puerros
- 1 manojo de ajos tiernos
- 3 dientes de ajo
- Una ramita de perejil
- Pimienta negra recién molida
- Aceite de oliva virgen extra y sal
¿Cómo elaborar el guiso de alcachofas con sepia?
En primer lugar, tenemos que limpiar las alcachofas. Para ello, debemos quitar las hojas exteriores y los tallos.
Seguidamente, cortarlas en cuartos y también retiramos los pelitos internos con una cuchara.
En una sartén con un poco de aceite, sofreímos las alcachofas y las salpimentamos. Todo ello, durante unos 15 minutos.
Mientras se están sofriendo las alcachofas, es hora de limpiar y cortar en rodajas los puerros.
Después, pelamos y picamos los ajos tiernos e incorporamos ambos ingredientes a la sartén, durante otros 15 minutos.
Rallamos los tomates y los vertemos sobre el sofrito de alcachofas. De mientras removemos todo y lo dejamos durante unos 15 minutos aproximadamente.
Es hora de limpiar la sepia y, a continuación, la cortamos a trozos más bien pequeños y los incorporamos en la sartén y sazonamos al gusto.
Dejamos cocer durante 30 minutos removiendo de vez en cuando.
Aconsejamos añadir un poco de agua caliente para que el sofrito no se quede seco ni muy espeso.
De mientras se va cocinando todo, prepararemos una picada con los ajos, el perejil, un chorrito de aceite y una pizca de sal.
Y, por último, 3 o 4 minutos antes de retirar del fuego, verteremos la picada sobre la sartén con la sepia y las alcachofas.
Ya lo tienes listo, sirve este plato bien caliente. Y a disfrutar.
